Nacional / Actualidad / Sociedad
La reforma del subsidio perjudicará a los desempleados que llevan mucho tiempo sin trabajo y a los empleados con trabajos de menor calidad

La principal novedad del acuerdo establecido entre el Ministerio de Trabajo y los sindicatos para la "simplificación y mejora" del nivel asistencial es la posibilidad de recibir la prestación contributiva por desempleo mientras se trabaja a tiempo completo, siempre y cuando el salario no supere el 225% del IPREM, es decir, 1.350 euros.

Sin embargo, al profundizar en los detalles, se descubren diversas condiciones inesperadas: esta compatibilidad está limitada al 80% del IPREM (480 euros en los niveles actuales) durante los dos primeros meses. Posteriormente, se reducirá considerablemente, lo que afecta negativamente a los desempleados de larga duración y a aquellos que acepten trabajos a tiempo parcial.

El esquema del documento legal que será presentado al Consejo de Ministros,  introduce modificaciones significativas respecto al presentado en diciembre, el cual fue rechazado por el Congreso con votos en contra de los diputados del PP, Vox y Podemos. La oposición de Podemos se fundamentó en la disminución del 125% al 100% de la base mínima en la cotización que el SEPE aporta para la jubilación de los beneficiarios mayores de 52 años. La versión actualizada del Gobierno rectifica en este tema, pero introduce la novedad de la posibilidad de compatibilizar las prestaciones con un empleo a tiempo completo.

El procedimiento es idéntico al utilizado con los subsidios. Es decir, la ayuda se convierte en un "respaldo adicional al empleo" que disminuirá gradualmente conforme el beneficiario la vaya utilizando. El documento indica que esta regla se aplicará a las ayudas contributivas por desempleo otorgadas un año después de su implementación (un plazo que el Gobierno ha ido postergando desde el 1 de abril hasta el 1 de julio de 2025) cuando hayan transcurrido más de 12 meses y el beneficiario comience un empleo a tiempo completo o parcial.

Sin embargo, se establece una excepción para aquellos que hayan comenzado a recibir el subsidio antes de esa fecha pero alcancen o superen los 12 meses en ese momento, quienes podrán compatibilizar un empleo a tiempo completo (no parcial) con su ayuda económica.

El tope anual reduce el conjunto de posibles receptores a la mitad de los que reciben la prestación contributiva. Según los datos más recientes del SEPE, alrededor de 430.000 individuos tienen un lapso de percepción registrado de más de 12 meses. De entre ellos, 198.000 alcanzan los 24 meses. Sin embargo, es difícil prever cuántos habrán cruzado estos límites en un año: la propia vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, señala que el 80% de los receptores no llegan a agotar el lapso de percepción registrado.

Un suplemento desigual al beneficio

La estructura resulta asombrosa, dado que la cantidad del suplemento disminuye conforme al periodo en que el individuo desempleado esté recibiendo el subsidio por desempleo. En ese sentido, entre el décimo tercer y el décimo quinto mes, el suplemento alcanzará el 80% del IPREM, igualando así la suma asignada en la actualidad para un subsidio (y siendo el mínimo que recibirá con el nuevo régimen). Esto equivale a 480 euros según el nivel actual de este indicador, pero posteriormente el porcentaje disminuirá gradualmente hasta el 30% (180 euros). Los empleados a tiempo parcial serán sujetos a reducciones aún más marcadas. Y aquí es donde surge la mayor revelación de la normativa.

En la actualidad, la compatibilidad entre un empleo a tiempo completo y el desempleo es imposible, pero sí se puede lograr con un trabajo de jornada parcial. Esto implica restar una parte proporcional del subsidio por el tiempo trabajado, según lo explicado por el SEPE. El nuevo sistema establece un límite no basado en esa cantidad, sino en el IPREM, el cual disminuye con el tiempo, un cambio que no existía antes.

Es importante tener en cuenta que el subsidio contributivo se reduce del 80% al 60% de la base salarial (el salario del trabajador) después del sexto mes, pero luego se mantiene constante hasta su agotamiento. Por lo tanto, las personas que reciben el subsidio durante más de 12 meses y tienen un trabajo a tiempo parcial no verán reducido el monto del subsidio con el tiempo.

Esta novedad explica el periodo de un año otorgado a los desempleados que trabajan a tiempo parcial: aquellos que deseen optar por este sistema un año después de que entre en vigor la normativa sufrirán una disminución en sus condiciones, con una ayuda mucho menor que la recibida por los desempleados con un trabajo a tiempo completo. La idea, similar al diseño de los subsidios, es que este suplemento (y el subsidio en sí) no se utilice como un soporte para empleos de media jornada, sino como un estímulo para el empleo. Sin embargo, en la práctica, esto significa un endurecimiento de las condiciones.

Otra interrogante surge: ¿Qué sucede con el subsidio que no se utiliza junto con el suplemento? La cantidad de un subsidio contributivo se calcula en función de la base salarial, no del IPREM como en el caso de los subsidios. En este sentido, el suplemento no guarda proporción con el subsidio. A pesar de ello, el decreto indica que igualmente reducirá los días de cobro del subsidio al igual que en los casos de los subsidios.

 

Translate »
Scroll al inicio

BUSCADOR

Empresas

Marcas

Inmuebles

APPs

Mapa Empresas

Mapa Marcas

Mapa Inmuebles

Mapa Movilidad

Útiles

Anúnciate

Mi Cuenta

Empleo

Blog

Ciudadano

Extras

Servicios Principales

Rehabilitación

Construcción

Renovables

Naval

Automoción

Inmobiliaria

Aficiones

Locales

Medios

Agroforestal

Fabricantes

Transportes

Seguros

Legal

Educación

Hostelería

Salud

Digital